3 Y si os escribí aquello, fue para no entristecerme a mi ida, a causa de
los mismos que deberían procurarme alegría, convencido respecto de todos
vosotros de que mi alegría es la alegría de todos vosotros.
4 Efectivamente, os escribí en una gran aflicción y angustia de
corazón, con muchas lágrimas, no para entristeceros, sino para
que
conocierais el amor desbordante que sobre todo a vosotros os tengo.